Smart Social City es un concepto de desarrollo urbano orientado a la mejora de la calidad de vida. Bajo este enfoque, la calidad de vida se entiende como una valoración del bienestar social general de individuos y sociedades, que se mide no sólo en cantidad y calidad de riqueza y empleo sino también el ambiente físico y arquitectónico, la salud física y mental, la educación, la recreación y la pertenencia o cohesión social y la percepción del ciudadano de dicha calidad.

Este concepto de ciudad se desarrolla en un espacio físico de forma responsable respecto al medio ambiente, gestionando de forma eficaz y sostenible los recursos de los que dispone, teniendo en cuenta las necesidades y expectativas de sus ciudadanos.

El Modelo Smart Social City se estructura en 13 áreas de desarrollo: urbanismo, arquitectura y edificación, energía, agua, residuos, sociedad de la información (TIC), movilidad, salud, educación, equipamientos socio-culturales, comercio, seguridad y protección ciudadana, y gobernanza.

El enfoque integral de Smart Social City confiere a cada área de desarrollo tres dimensiones transversales (Smart, Social, City) que buscan ligar cada acción, cada infraestructura, servicio o sistema al objetivo global de la operación, mejorando la calidad de vida de los ciudadanos, a través de una ciudad.